Los mejores trucos y métodos para enfriar el vino en verano
Seguro que más de una vez te ha sucedido que has necesitado enfriar rápidamente una botella de vino y no has sabido cómo hacerlo. Tomar el vino a la perfecta temperatura es clave. Un vino muy frío estropea el sabor, pues apenas nos permite percibir los aromas, mientras que uno muy caliente hace que percibamos más el alcohol.
Si por cualquier circunstancia se nos ha olvidado enfriar el vino en la nevera y no disponemos de enfriador de botellas, sigue estos consejos. ¡Ah! Y bajo ninguna circunstancia se te ocurra echar hielo a la copa: esto hará que el vino pierda sus características y se echará a perder. Al deshacerse los cubitos, el vino se aguará.
En este artículo te traemos los mejores consejos para enfriar el vino en verano y poder disfrutar de los mejores caldos a la temperatura adecuada. Aquí tienes las formas más fáciles y efectivas de enfriar el vino cuando dispones de muy poco tiempo.
- Agua fría con sal para enfriar el vino
Es el truco que todos conocen. Basta con rellenar una cubitera con hielo y agua fría y sumergir la botella durante 15 minutos. Si no tienes cubitera, puedes utilizar cualquier otro recipiente que te permita sumergir la botella. Para acelerar el proceso y reducir la espera a solo 5 minutos, tendrás que añadir una cuchara sopera de sal y mezclar todo bien antes de introducir la botella. La sal disuelta ayudará a bajar antes la temperatura del agua.
- Utilizar una toalla húmeda
Otro tip interesante es el de envolver la botella con papel de cocina o un trapo húmedo y meterla en el congelador. El envoltorio se congelará y así enfriará la botella. En unos 15 minutos tu botella estará a la temperatura perfecta. Si cuando saques la botella el papel se ha pegado al vidrio, ¡no te preocupes! Bastará con poner la botella bajo un chorro de agua tibia para que se deslice fácilmente.
- Uvas congeladas
Es uno de nuestros trucos favoritos para enfriar el vino rápidamente. Cualquier vino conseguirá enfriarse rápidamente añadiendo solo un par de uvas congeladas a cada copa. La principal ventaja es que no modifica el vino, no agua la bebida a diferencia del hielo. Para congelar las uvas adecuadamente, recuerda lavarlas, secarlas con papel de cocina y guardarlas en el congelador en un recipiente con tapa.
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.